La trata bajo la sombra de la pandemia

Autor/Fuente: elpais.bo

Publicado: domingo junio 27, 2021

La trata y tráfico de personas es un delito que crece a hurtadillas en Tarija y en toda Bolivia, y que se alimenta de tiempos de crisis. Hoy mientras todos están centrados en la pandemia de Covid-19 miles de personas viven otro calvario.

Los datos consolidados entre la Policía Boliviana y el Observatorio del Delito de la Trata de Personas reportaron en 2020 un total de 451 casos a nivel nacional. La cifra fue mayor en el año 2019, con 526 casos entre trata y tráfico, pornografía y delitos conexos.

En 2021, se reportan cinco denuncias por día en cada departamento. La directora general de Lucha Contra la Trata y Tráfico de Personas del Viceministerio de Seguridad Ciudadana, Carola Arraya explicó que son al menos tres las rutas más importantes de salida de personas. Hacia Argentina está la ruta por Bermejo, Yacuiba, Villazón; a Perú, por Desaguadero, y la ruta por Chile, también un punto importante, está siendo investigada.

En palabras de Arraya este delito está en crecimiento y la pandemia ha jugado un rol importante. “Mujeres adolescentes que se mueven de su lugar de origen para buscar trabajo en otras regiones, son engañadas, trasladadas a otros sectores para realizar otro tipo de trabajos, son víctimas de explotación laboral, explotación sexual”.

Uno de los últimos casos sucedidos en Tarija da cuenta que una menor de 15 años estaba siendo captada y sería víctima de trata y tráfico por parte de sujetos que incluso, estarían usando a la menor para ofrecer servicios sexuales a terceros.

De acuerdo a la Policía en Tarija la pandemia ha generado una  gran crisis económica, en cuyo marco los depredadores sexuales están captando a menores (…). De esta manera, es fundamental el trabajo urgente y oportuno de las autoridades sobre este problema, esto va más allá de habilitar números telefónicos para la denuncia.

Las soluciones deben ser integrales, deben contener un plan de lucha contra la trata y tráfico de personas, personal especializado en las investigaciones, protección a la víctima y familiares, será también fundamental desburocratizar los procesos judiciales, pero sobre todo  aplicar todo lo planificado a raja tabla.

Pero no todo está en manos de las autoridades. Es sumamente fundamental que los padres de familia, especialmente de menores de edad hagan un control riguroso de los aparatos celulares y revisen las páginas a las que ingresan sus hijos, es crucial que sepan bien quiénes son sus amistades y qué tipo de relacionamiento tienen.

Dejamos en claro que la trata de personas es uno de los peores crímenes contra las personas ya que vulnera el derecho a la libertad, a la dignidad e incluso a la propia vida.

Sus consecuencias individuales, familiares y sociales son devastadoras y destructivas; convierte a las personas en objetos de esclavitud y comercio, además de causar profundos e irreparables daños a las familias.

Éste es sin duda otro de los problemas que gana terreno bajo la sombra de la pandemia, es urgente ponerle freno.

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