Autor/Fuente: lostiempos.com
Publicado: miércoles marzo 7, 2018
Un remezón político causó ayer la decisión del expresidente Jaime Paz Zamora de declinar su participación en la fase de alegatos orales de la demanda marítima. La exautoridad alegó que el presidente Evo Morales quiere contraponer la demanda por el mar y el respeto a la democracia, en referencia al referendo del 21F. El Gobierno lo atacó y otros sectores lo respaldaron.
El exmandatario cuestionó las acciones del Gobierno además del curso de la política internacional del presidente Evo Morales en temas como el apoyo a su par venezolano Nicolás Maduro. Esta decisión, que en cierta forma quiebra la iniciativa del Ejecutivo, desencadenó ataques en su contra de autoridades gubernamentales.
“Tomé la decisión de disculparme y no ir a La Haya. Prefiero, como todos nuestros compatriotas, esperar el resultado en territorio nacional y rogar a todos los santos y con el optimismo de siempre deseando que las cosas salgan bien, pero prefiero enterarme desde aquí”, expresó el exmandatario en conferencia de prensa.
Durante el contacto con los medios, cuestionó la actitud de Morales al pretender “mostrar hacia afuera” una unidad de todos, lo que significaría un apoyo político a su persona, hecho que no refleja la realidad que se vive en el país, él no querer respetar la voluntad del referendo constitucional del 21 de febrero. Es decir, buscar contraponer lo que es la demanda del mar con la democracia.
“El Presidente (Morales) divide permanentemente y nos muestra: queremos mar o queremos democracia. Y esta división no debemos fomentarla. Un tema de unidad lo convierte en una forma de división confundiendo que, si uno apoya el tema del mar, se apoya políticamente al Presidente. Bolivia quiere mar y democracia, quiere ganar en La Haya y que se cumpla el mandato del 21F todo junto”, explicó.
La Cancillería invitó la semana pasada a Paz Zamora (1989-1993) y a los expresidentes Guido Vildoso (1982), Jorge Quiroga (2001-2002) y Carlos Mesa (2003-2005), así como a excancilleres, gobernadores, empresarios y sindicalistas, a viajar a la sede de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), delegación que estará encabezada por Morales.
Paz Zamora también arguyó que el apoyo de Morales, durante la reunión de los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) en Venezuela, a Maduro —a quien Perú pidió que no asista a la Cumbre de las Américas en Lima, el 13 y 14 de abril— demuestra que no está actuando de forma adecuada,
También lamentó que el mandatario boliviano le ataque constantemente en Twitter. “Me insulta, me calumnia, me dice de todo, podía esperarse un poco a que volvamos de La Haya para insultarme”, dijo, en referencia a un tuit de Morales que lo acusa por el caso narcovínculos de 1992.
La respuesta no se dejó esperar. El vicepresidente del Estado, Álvaro García Linera, manifestó que con esta actitud estaría dando la espalda a Bolivia y que todos los argumentos esgrimidos son anticuados.
“Son las reflexiones decrépitas de un político decrépito, entonces es eso”, señaló García Linera.
A su vez, el ministro de la Presidencia, Alfredo Rada, comentó que el Gobierno lamenta la decisión del exmandatario, pero la “reivindicación marítima va más allá de los cálculos egoístas y mezquinos de viejos políticos”.
Bolivia y Chile tendrán cada uno tres días. Bolivia intervendrá el 19 y 20 y 26; el 21 habrá un receso; el 22, 23 y 27 le tocará a Chile.
Tres horas de alegatos para cada país. Las audiencias serán entre las 10:00 y 13:00 hora de Holanda (5:00 a 8:00 hora de Bolivia).
Centenaria demanda boliviana por mar. Bolivia instauró en 2013 una demanda contra Chile ante la CIJ para que cumpla ofrecimientos hechos a lo largo de la historia para negociar una salida soberana al océano Pacífico.