Autor/Fuente: paginasiete.bo
Publicado: miércoles septiembre 18, 2019
“Se habla de (que jugaron) la ouija y otras cosas, lo que se hace invocando al espíritu del mal (…), creo que, como creyentes, lo primero que haría yo, como obispo y como sacerdote, es hablar uno por uno con los jóvenes y hacer una buena confesión; es decir, enfrentar el bien con el mal”, dijo ayer el monseñor Jesús Juárez.
Las declaraciones de Juárez se dieron a raíz del caso de 25 estudiantes de un internado de la comunidad San Jorge de Ipati del municipio de Huacareta (Chuquisaca) que presentaron delirios, desmayos y comportamientos extraños, atribuidos a una “posesión demoniaca”.
Los extraños síntomas comenzaron luego de que el grupo participó del juego de la ouija en ese establecimiento. En las entrevistas médicas, los primeros cuatro estudiantes que presentaron convulsiones contaron que “veían a un hombre fuerte y robusto que les quería hacer daño”. Videos publicados ayer muestran como varios de los jóvenes convulsionan.
Del hecho fue informado Juárez, el 11 de septiembre, por parte del párroco de San Pablo de Huacareta, Andrés Salazar.
El sacerdote envió una misiva al arzobispo de Sucre para informarle del caso de 15 jóvenes de la comunidad “que estuvieron poseídos por el demonio”, reportó el diario Correo del Sur.
El pasado viernes 13, el párroco de Huacareta ofició una misa y posó las manos sobre los estudiantes mientras realizaba una oración de exorcismo, que, según sus propias palabras, debe realizarse por lo menos tres veces.
La situación causó preocupación en los maestros e impotencia en los padres, quienes, por recomendación de la psicóloga, pidieron suspender las clases para evitar que otros niños vean el comportamiento de sus compañeros, quienes incluso “han querido largarse del segundo piso del colegio”.
Sin embargo, ayer, tras la evaluación de un equipo multidisciplinario de médicos, se determinó que los 25 jóvenes que presentaron los extraños síntomas padecen en realidad de una psicosis colectiva; se analiza además si estuvieron expuestos a las plantas alucinógenas que se encuentran en el lugar del hecho.
La responsable de Epidemiología del Servicio Departamental de Salud (Sedes) Chuquisaca, Norma Amado, indicó que el primer informe señala que las reacciones de temor y agresividad sólo se presentaron en jóvenes que están en el internado, por lo que la médica psiquiatra diagnosticó una “psicosis colectiva”, aunque se continúa con el tratamiento.